Si bien podría hablarse de acercarse a lo que es contemplando el momento presente, el aquí y el ahora, quiero referirme sobretodo a la esencia, desenmascarando al falso yo lo suficiente como para que tampoco se violente o se pase a una resistencia. Sin embargo, en este mundo hay quienes no gustan de inyecciones y aún así se requieren. Así que espero te encuentres de buen ánimo o con la actitud a la altura para enfrentar éste tema.
Se ha comentado en una ocasión anterior que no soy mis preocupaciones, no soy mis defectos, no soy mis pensamientos incesantes, no soy mi mente impulsiva, no soy mis sufrimientos o penas, no soy mis culpas, no soy mis tropiezos o fracasos, no soy mis errores, no soy mis juicios, no soy un mar de emociones, no soy mi personalidad, no soy mis ideales o deseos, no soy un organismo biológico, no soy un cuerpo.
En esencia eres la chispa divina, la voz de tu intuición y el espíritu que da vida. Sin embargo, cuando nos movemos en un plano más acostumbrado o en el mundo externo parecemos mezclarnos con lo que no es, se comprendería entonces si tiene lugar un conflicto de identidad.
Como muchas veces es más sencillo observar a otro, encontrando algunas veces personajes fuera de serie, aquellos maestros de la vida que pueden resultarnos incómodos siendo fácil plantear que el falso yo opaca la luz verdadera, de modo que remitirnos a la Luz cuando hay ofuscamiento resulta difícil desde la experiencia en el mundo. No obstante, cada quién puede pasar por momentos de ofuscamiento en mayor o menor grado y cuando se observa en casos externos que parecen extremos también es oportunidad de dar testimonio o presencia de la Luz que hay en tí en un contexto sano, puede ser algo sencillo sin necesidad de ir al extremo ni exponerte.
La chispa divina, esencia o aspecto de Luz que se expresa a través de la experiencia en el mundo en ti es lo más verdadero, esa voz de la intuición que a menudo se dificulta escuchar es tu propia Voz, no obstante el reconocimiento y como lo enfrentas puede ser gradual puesto que en un mundo dual puede dificultarse que llegue a ser clara, en ocasiones esto confronta la dualidad o genera una defensa de un aspecto que puede sentir que pierde el control, por así decirlo (el ego).
El ejercicio de pasar a un contexto y plano mental de la unidad en donde puedas ver al otro inocente, libre de su forma y personalidad, libre de sus actos, como figura que se desvanece ante lo que es, es un desafío para la mente que nunca se lo había planteado o apenas comienza este entrenamiento. Y aunque avances y continúe siendo un desafío, es un llamado a la memoria de la inocencia que también es tuya, claro, hablando desde un nivel metafísico, más lo que es se escapa de lo físico puesto que somos mente y no una mezcla que no encaja.
Aquello que es permanece inocente, intacto e invulnerable puesto que su origen está más allá de este plano y nada tiene que ver con un mundo de personajes y formas, ni vibraciones.
Es conveniente asimilar gradualmente lo planteado dado que, como se ha dicho, puede representar un ataque a lo que has considerado ser. Esto tampoco significa una apertura para negar lo que es, pues lo que es siempre es aunque pretendieras negarlo, comprendiendo que ante lo maravilloso y bello de lo que es no tiene lugar lo que no tiene lugar. En lo que es Uno no hay lugar al mundo de apariencias o personajes que aparecen y desaparecen como en un sueño.
Sin embargo, al enfrentarnos a esta experiencia están en juego emociones, sentimientos, el vehículo del cuerpo, pensamientos e influencias de otros pensamientos, como frecuencias que en ocasiones se captan o se transmiten, indistintamente de si son las mejores o no, y por supuesto, la personalidad y el temperamento, así que no parece tan sencillo identificar la voz de la intuición que es la que habla de ti.
Una clave para identificar lo correcto es tomar decisiones desde al amor o la paz en lugar del temor, la desesperación, el ofuscamiento o la culpabilidad. Agregar cargas de culpas no es lo que indicaría la intuición, distinto es que en tu corazón señale una corrección para tu mente. Aprender a escuchar la intuición es precisamente una tarea debido a la confusión de la dualidad, aunque te digan que observes las señales, imágenes que te llegan a la mente, algunos sueños, canciones, números que se repiten, patrones de situaciones, eso sería un principio necesario. A mi entender, en la medida que se aclara o escuchas la voz que habla por tu esencia por medio del entrenamiento apropiado, sería como tener una ventaja encontrándote en el laberinto de esta vida, no importa que aún te topes con pasajes enredados, la salida estaría al alcance.
¿Cómo se plantea resolver la mezcla que parecemos ser? Una manera de expresarlo es mediante el reconocimiento de cada cosa o nivel. Reconoces lo que ves con los sentidos en tanto te encuentras atendiéndolo aunque en razón del otro nivel puedas verlo ahora como una proyección pero sigues con esa experiencia aparentemente individual de manera natural. Reconoces que lo real se encuentra en ti y que cuentas con la Voz de un Guía que te recuerda la unidad y con el cual vas corrigiendo las causas de lo que se presenta en el mundo, usándose éste como recurso. Anteriormente, se ha negado al mundo pero no desde su propio nivel, de hecho te encuentras atendiéndolo, siendo así podría tener una mejor atención o perspectiva.
Si la visión de un mundo que se origina en un plano mental se llegara a comprender mejor en la sociedad, tendría una mayor apertura el conocimiento científico y espiritual que incluso podría aportar un nuevo tipo de avances y una sociedad con un gustoso entorno de paz.
Imagina que desde un Universo mental, o desde un aspecto de la Mente original, una curiosa idea llevó a soñar un mundo de ilusiones dónde la mente parecía separarse en muchas mentes. Tal fraccionamiento parecía innumerable aunque tan solo fuese un juego mental de separación que jamás ha tenido lugar en lo que es Uno. Este planteamiento es inspirado en “Un Curso De Milagros” y sería importante remitirse a lo que éste dice si tomas ese curso.
Mas dado que resulta ser un juego mental o virtual es posible llevar un proceso individual hasta el sentido de integración o corrección, no obstante, tal recorrido o integración es también parte de esa ilusión mas desde la perspectiva del individuo puede ser como una experiencia o desafío, quizás necesario o no.
Una cosmología como ésta nos brinda una visión que puede facilitar la comprensión y posición frente a este universo. En mi rompecabezas personal ha sido esencial hacer cierta distinción y creo que comparto una lectura sobre UCDM cercana al Dr. Kenneth Wapnick y Gary Renard. Desde el Espíritu el mundo No existe, el ego No tiene lugar en el universo original, ni su sistema de pensamiento. Usando un lenguaje metafórico, al parecer el ego fue resultado de una confusión debido a una idea loca de creer que era posible un universo separado de Dios. He aquí que se ha generado un problema de identidad.
Aunque el individuo experimenta el mundo, el cual se ha vuelto un salón de clases, y parezca necesario un ego individual para actuar en la vida práctica, no eres el ego, muy adentro de ti esta la esencia del Hijo de Dios Inocente, por lo que desde allí no aplican culpas, ni temores, ni evolución, ni leyes universales, ni tienes que integrar sombra alguna. Estas llamado a este reconocimiento interior del Cristo mismo accediendo a tu verdadera identidad.
Cuando empiezas a comprender quién eres y la falsedad de la separación verás las cosas más simples, aunque claro, al ego no le gusta lo simple y es cierto que en la vida hay que considerar un sentido práctico, aunque te podrías enfrentar a un repertorio de conocimientos y practicas, variedad de cosas que podrían verse innecesarias desde la óptica del Espíritu Absoluto que no las requiere.
También puedes acceder al conocimiento de este universo para sacarle provecho pero No se debe olvidar que es cuestión de un juego, una ilusión, algo que involucra magia, y tener presente con quién te estas identificando, o cual sistema de pensamiento estás acogiendo en un momento dado. Si observas a posteriori que experimentas temor o angustia, entonces has elegido el sistema de pensamiento del ego, pero puedes elegir de nuevo con tu Guía Interno, en este sentido no tienes que profundizar en el conocimiento de las leyes del universo para eso.
El proceso se experimenta de modo individual, en este sentido, no se debe restar importancia al papel que aportas en tu camino aunque siento que al final restaría importancia los padecimientos momentáneos mas es comprensible considerarlos por un momento si eso hace parte de lo que experimentas mientras marchas de regreso a casa.
Por supuesto que es válido reír como también llorar, puedes permitírtelo, ojalá sin extenderlo, puesto que las cosas pasan ante nuestra vista mas lo que Es permanece. Ya sé que en algunos más que otros parece que aún quedan recuerdos innecesarios que hacen parte del pasado, aveces sólo se necesita sacarlo afuera con alguien que sepa escuchar como también hay profesionales y terapeutas para ello en este mundo, y por supuesto técnicas que pueden ayudar, mas se vale simplemente vivir el duelo como también levantarte, la práctica del perdón que se ha sugerido anteriormente da sus frutos, soy testigo de ello.
Me gustaría referirme desde la perspectiva individual o mente como un punto focal de la divinidad, como si cada punto o aspecto fuese en esencia la divinidad, la fuente misma, aunque esto sea tan sólo un acercamiento dentro del plano del mundo que considera opuestos, contrastes o mezclas que nada tienen que ver con el Ser. En dónde La Luz irrumpe radiante se disipan las sombras, y no tiene lugar la oscuridad ¿Qué sería entonces lo que se está llamado a amar? ¿algo sin sustento o aquello que es? ¿desde dónde se puede fundamentar el amor propio?
En la realidad práctica no estamos exentos de caer en los juegos o afrentas de la presentación de este mundo de modo que ésta pregunta es simplemente un planteamiento para tener presente en algún momento a modo de entrenamiento, no como imposición. Sin embargo, ayuda mucho reconocer lo que es para distinguirlo de lo que no es de modo que no te creas cualquier cuento o te soportes algo que no necesitas, si bien puedes agradecer internamente algunas veces.
Evidentemente, se pueden observar actitudes en un mundo de personajes que no es para que pretendas que todo es color de rosa sino que encuentras matices y en muchos casos no hablan de lo que es, o se presentan para confrontar el recuerdo de lo que es. Mas si se habla de lo que es aplicándose al plano del mundo físico, se corre el riesgo de quedarte allí, incluso ver el cuerpo como si fuera un dios o un héroe cuando lo que es está dentro de ti. El cuerpo simplemente se cuida, lo necesitas para un recorrido provechoso.
Por otra parte, pensar en la unidad dentro de este mundo nos remite a expresiones como “yo soy aquí y soy allá”, “soy ese árbol y todo lo que observo”, algo para tener cuidado, no porque se niegue como una potencial experiencia sino porque al final no existen cosas en el Ser, se estaría aún soñando quizás de modo ligero.
Dios es, nada más. Por supuesto que esto niega al universo observable, a cualquier ente o persona, mas estaría en un plano distinto. Sin embargo uno de los planos debe ser el verdadero y mientras estás aquí sientes como si fuera posible recordarlo, incluso experimentarlo, sobretodo porque te encuentras sosteniendo el sueño, más los sueños se disipan cuando el soñador es llamado a levantarse.
La vida es un camino de aprendizaje y lo aprendido da suficientes bases, aunque estas mismas puedan validarse en algún otro momento, de modo que si vas reconociendo tu voz interior sabrás distinguir y actuar con cierta libertad en el mundo, aunque La Libertad está más allá de este universo. Si sientes decir algo a alguien que está en una actitud irrespetuosa en cierto momento, bien lo puedes hacer, del mismo modo que considerar qué sería lo más inteligente o sabio, además cuentas con un Guía Interno siempre a tu alcance.
Somos en esencia uno, en el plano del mundo quizás se proyecta como lo inconmensurable así como también el aspecto o chispa que puede brillar si la dejas Ser. Mas si parece apagarse la Luz, la cual nos remite a lo que es, ¿qué se necesitará para recordar lo que es?