En este universo tienen lugar leyes que pueden validarse mediante la observación, cada una bajo un contexto o marco de referencia por lo que no serían la última palabra, o simplemente tienen lugar a su aplicación en cierto momento y circunstancias, no se busca tampoco negarlas en el plano del mundo. En efecto, dentro de lo común si alguien se mueve en el marco de referencia en donde aplica una ley se hace correspondiente con ella, indistintamente de si la conoce o no. Sin embargo, muchas veces podríamos estar buscando reglas o asignando leyes cuando las cosas pueden ser más simples.
Si el universo se ve como una gran ilusión mental o un estado de sueños, entonces tendría que comprenderse que nunca tuvo un comienzo ni tiene un final por sí mismo, ni es infinito. Al parecer el mundo o universo de los fenómenos cuida muy bien de no presentarse así, o ha sido imposible suprimir cierto orden en medio del caos. Precisamente, siendo sospechoso que las ilusiones tengan cierta jerarquía, se pueden considerar leyes universales, un orden en medio del caos, una Luz.
Hemos hablado de dos sistemas de pensamiento distintos, el inspirado por el Ser Absoluto y el del Universo inmediato, o bien, el del Espíritu de Verdad y el del Ego del mundo. “Un Curso de Milagros” nos muestra el sistema de pensamiento del Espíritu Santo, nos remite a un Universo original en el que no tienen lugar opuestos, ni nada distinto al Amor, tampoco tiene lugar el caos, ni la vibración, ni la energía, ni la magia.
En este sentido y en el plantemiento del texto de “Un Curso de Milagros”, puede identificarse que las leyes del mundo que observamos han surgido de la influencia de un Ego o vienen de éste. Cómo éstas pueden ser reinterpretadas y reorientadas entonces tendría quizás lugar considerar leyes conforme a una sabiduría y un amor. Sin embargo, siendo estrictos y claros, podemos colocar cada cosa en su lugar, las leyes condicionan, quizás sean necesarias en este mundo, pero que vengan del Amor no tiene sentido en el sistema de pensamiento del Espíritu, pués desde su óptica tales leyes sólo aplican en un universo sin sustento o en una mente desorientada.
Partiendo de lo anterior, cualquier postulado sobre ley estaría bajo el marco de referencia del mundo de la multiplicidad o dualidad, aunque sea a un grado que tienda a cero, distinguiéndose del universo mental de la unidad del Ser que se puede recordar en paralelo mientras experimentas este universo o mundo. Si la multiplicidad, dualidad o separación, puede suponer diversos marcos de referencia, estos tendrían lugar dentro del mismo contexto. Mientras el Absoluto simplemente Es.
Cuando uno escucha hablar de la “Consciencia” aún estaría en los límites del contexto de la dualidad, puesto que supone la inclusión de un opuesto así como un “Yo”, mientras que el plano paralelo que se ha venido indicando es Unidad sin lugar a sombras. No quiere decir que se niegue información, mitos de creación, experiencias, técnicas de ayuda personal u otros, si bien algo de eso podría cuestionarse, lo que se está indicando es que aún corresponden al marco de referencia de un universo convencional, distinto del que se ha introducido.
Considero que en ocasiones conocer aspectos de la dualidad, incluso a un nivel aparentemente profundo, podría llegar a ser útil para distinguir en qué plano te encuentras moviéndote. Si este tema te resulta más avanzado o con demasiados tecnicismos, perfectamente puedes saltarlo.
Para empezar hablemos de la Ley de la Atracción que se ha venido escuchando desde hace un par de décadas de un modo más abierto. Esta ley se fundamenta en que tu mente atrae aquello en que tienes puesta tu atención. Aunque te plantees su contexto de aplicación en lo positivo puedes encontrarte en ocasiones que parecería mas favorable con las cosas poco agradables, como si atrajeras más de lo mismo sin hacer distinción alguna, sin embargo quienes tienen mejores resultados evidencian que lo positivo, sueños o ideales pueden ser exponenciales y hasta surgen nuevos retos.
Para simplificarlo en primera instancia, diré que ciertamente el postulado de esta ley nos señala la influencia del pensamiento en este mundo de vibración, pero la ley de la atracción no es la última palabra.
Dado que los deseos parecen inevitables en un sentido práctico no se tiene que ir en contra de esto, algunos pueden ser orientados o tienen lugar desde una inspiración, considerando el riesgo de estar en la cuerda floja del sufrimiento, por eso es que es conveniente no depender del resultado o perdonarse. Alguna vez llegué a escuchar a Abraham-Hicks que se enfoca de modo especializado en este tema. Creo que esta fuente puede ser de ayuda para muchos como motivador y no tanto por la Ley de la atracción en sí, respetando claro está su aporte.
Por otra parte Neville Goddard enfatiza “el sentir” siendo la clave para manifestar partiendo desde lo que eres, situándote desde un plano superior o lo que denomina “tu propia maravillosa imaginación humana” (la consciencia o Yo Soy) desde dónde todo ya es por lo que tiene lugar la asunción de las cosas, diferenciándose de autores que se quedan en el deseo o el simple pensamiento. En orden a esto, el gran secreto parte de reconocer tu esencia y no la ley en sí. Y creo que para que la ley de asunción se facilite, la gratitud tiene un papel clave, pues sentirte agradecido por eso que resuena contigo (aunque aún no sea parte de tu experiencia actual) es lo mismo que asumirlo.
También he llegado a escuchar la fórmula “atención, intención, sin tensión”, siendo la última parte semejante a soltar para no depender del resultado o del tiempo. Personalmente, he recibido gratamente la recomendación del libro “Piense y Hágase Rico” de Napoleón Hill, dónde todo comienza por una idea ferviente y auténtica, la determinación para llevarla a la acción buscando un plan, desarrollando también en su temática aspectos como la auto-sugestión, la imaginación, la mente subconsciente, hasta llegar al sexto sentido.
Resumiendo, los pensamientos sí pueden influir en nuestra experiencia pero para mi resulta sospechoso cuando se busca justificar que si no funciona esta ley es porque una persona no hizo bien las cosas para atraer lo que deseaba como si siempre tuviera que funcionar y no existera ninguna otra perspectiva, o como si fuera la ley por excelencia, un absoluto en el mundo de lo relativo, eso la hace ver ridícula. Mientras cuando atraes cosas que se repiten debido a la resistencia coincide en que funciona. Por eso, prefiero el concepto de correspondencia y de fluir con la vida que no tiene que asociarse con deseos. Sin revisar por ahora el asunto con los deseos, considero detallar algunos aspectos, a saber:
“Un Curso de Milagros” nos habla de un “guión” escrito en principio por el Ego (así como también de una lectura alterna e iluminada del guión), siendo más sencillo comprender que lo que esté en los múltiples guiones posibles, para una persona, pueden mostrar que una ley opere a tu favor o que no se ha diseñado un guión específico para ganarte el premio mayor la lotería en esa experiencia de vida. No obstante, existe un guión alterno en orden al Espíritu, quizás el Santo Guía hasta considere orientar los anhelos más sensatos de tu esencia, sobretodo el de emprender el camino de retorno al Hogar verdadero, desear fervientemente la Paz de Dios.
Desde un modo sencillo de ver las cosas, si existe un propósito mayor no tiene nada que ver que cuando te sucede una situación obedezca a la ley de la atracción. El propósito generalmente no se ve de manera inmediata sino avanzando el recorrido. Personalmente me ha ayudado mas tener presente la idea de que “todo es perfecto”.
Si fuera aplicable una ley mayor en relación a un asunto que gira sobre el mismo aspecto, la ley menor no tendría aplicación. Por ejemplo, si existe una ley de la evolución no tendría aplicación ley de la atracción estando esta por debajo de la anterior o supeditada a un contexto menor. Esto podría explicar también el por qué para algunos no parece que funciona la ley de la atracción a su favor ante alguna condición o situación en la vida.
Puedo imaginar y visualizar que en tanto tu grado de espiritualidad tenga una comprensión mayor, estarías al nivel de saber que fuiste tu mismo quién participó, proyectó o accedió a condiciones que quizás ya no tendrían que aplicarse. No obstante, desde ahora se pueden ir removiendo ciertas limitaciones y condicionamientos, no necesariamente la ley de la atracción, pero sí creencias que ya no se necesitan hasta el punto de llegar al grado anteriormente mencionado según tu proceso, no es cuestión de forzarlo. Si se comprende esto, sería como caminar sobre las aguas del mar. Además, puedes elegir de nuevo y eligir bien con tu Guía Interno.
Puede ser que todo esté bien, y digo que “puede ser” dado que tampoco se trata de tener una mentalidad de borrego. En ocasiones puede parecer que tus decisiones sean poco o nada acertadas y te encuentres en un contexto de vida que dista de lo que tu sientes cuando venías teniendo un mejor entorno para cuidar la Paz. Esto puede ser un poco más de lo que se ha mencionado acerca del propósito y de su aceptación. En este sentido, puede parecer que tomaste un camino equivocado y te haces correspondiente con cosas que no sentías necesitar, y en verdad puede ser que existan cosas que no necesites o que ya has aprendido. Si fuera por ley de atracción requerirías una voluntad aferrima para nivelar tu frecuencia, o te pesa la ley como si se tratara de una imposición absurda que generaría mas resistencia y te dejaría en un camino sin salida, con más de lo mismo…
Y qué pasaría si todo está bien y estás cumpliendo la función del perdón, no obstante que mereces un entorno liberador pero tu presencia en un entorno de vida puede estar cumpliendo un propósito, aunque por un momento parezca incómodo para otros y para ti. Finalmente, cumplido esto verás la salida, por lo que es importante guardar la Paz y confiar en tu intuición, tu voz interior, a la vez que también perdonas lo que se presenta (son oportunidades de perdón profundo).
Otra manera de ver esto último, es que desde la esencia al final no importan las cosas que sucedan, en efecto esto no se siente así mientras lo experimentas. Sin embargo, mientras te resistas se genera más de lo mismo haciéndote correspondiente con lo que podría suponer esta ley, por lo que lo experimentas de ese modo. Ciertamente, se requiere auto-comprensión, paciencia, confianza, fé, fortaleza y aceptación o indefención. La saturación o la implacabilidad de esta ley, que puede parecer como un muro, quizás te prepare para nuevos escenarios en donde sabrás orientar mejor tus pensamientos, emociones y la voluntad, entonces sabrás elegir mejor o tomar decisiones bien orientadas desde la esencia.
Considera que si sientes ser una persona espiritual y te encuentras muy bajo de ánimo, en la tormenta también se puede llegar al punto intenso en la mitad de la tormenta, o bien, en el periodo de una noche oscura se encuentra la noche más oscura del alma. Si estas pasando o has pasado por ahí, luego verás que todo pasa, tu alma se habrá enriquecido. Concluyendo…
¿Así que crees que hay una ley de atracción? Pues bien, usala. Pero si deseas resultados positivos primero apuesta en favor de un entorno de Paz, he ahí la necesidad del perdón del que hemos hablado.
Otro aspecto a considerar es el pensamiento de que no se requiere ningún esfuerzo para alcanzar tus metas. La idea de esfuerzo fué inculcada en nuestra sociedad como algo positivo y de alabar cuando no tiene que ser así. Por otra parte, cuando empiezas a escuchar que la idea de esfuerzo es equivocada, si se lleva a un extremo puede caerse también en un error. Pienso que es importante rescatar el sentirte merecedor pero existen consideraciones en cuanto a la naturaleza de un asunto. Por ejemplo, si se remite a construir una nave para un viaje espacial se requiere de su dedicación, esperar que se construya de la noche a la mañana sería insensato en nuestra realidad práctica. Salvo que te encuentres en un modo superior dónde simplemente con pensarlo aparece la nave, mas carece de sentido que fabriques una si puedes viajar con el pensamiento.
En palabras sencillas, hay cosas que requieren de un esfuerzo. Es cierto que la palabra “esfuerzo” se presta para ambigüedad puesto que no se siente así cuando haces lo que en realidad te gusta y lo disfrutas, sin embargo en estos casos te ocupas y no poco, por eso este lenguaje requiere también de buenos entendedores así como coherencia con la naturaleza de las cosas. Si se maneja un marco de referencia mental, entonces se puede comprender que no tienes que hacer nada desde tal plano, distinto en la realidad práctica. Por eso, hay quién dice que existe la ley de la siembra y la cosecha.
El Kybalión es un libro que se asocia con Hermes Trismegisto en torno a lo que se considera como filosofía hermética o los siete principios de la alquimia hermética, aunque es probable que algunos de sus discípulos hayan sido los autores. El primer principio del Kybalión nos remite al plano metafísico o de la mente, reflejando los demás la experiencia de la dualidad.
Para quién guste del tema, puede ser provechoso conocer los principios que operan en este universo y saber distinguirlo del sistema de pensamiento del Ser Absoluto en donde no tienen lugar opuestos, ni vibración, ni energía, ni leyes cósmicas.
El TODO es mente, el universo es mental
Podría decirse incluso que el universo se origina de una mente, sólo que tendría que desvincularse de lo físico o de un cerebro, de hecho tanto la materia visible como indetectable tendría lugar en esa mente que denomina TODO. En otras palabras, Espíritu Viviente en cuya mente vivimos nos movemos y tenemos nuestro ser.
Como es arriba es abajo, como es abajo es arriba. Como es adentro, así es afuera; como es afuera, así es adentro
Puede observarse en el universo una relación de lo macro con lo micro, y en el sentido opuesto, en lo micro se encuentran patrones semejantes a lo macro. Todo se relaciona de algún modo, incluso lo de afuera se relaciona con lo que está adentro. Esto último tendría semejanza a lo que Carl Gustav Jung denominó “el espejo”.
Nada está inmóvil, todo se mueve, todo vibra
Lo que observamos que existe es una representación de un estado vibratorio. Si nos apoyáramos en la ciencia conocida encontraríamos el concepto de átomos en movimiento con alguna carga vibratoria. En ese contexto, el nivel de vibración espiritual mas alto estaría donde se origina TODO. Este principio también responde a la gradualidad de muchas cosas, sería como mover una perilla de radio-frecuencia para sintonizar una emisora, en este caso correspondería a un estado. Si se observara cierta semejanza con las enseñanzas del Buda, estaríamos hablando de la ley de la impermanencia.
Todo es doble, todo tiene dos polos, todo su par de opuestos, los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado, los extremos se tocan, todas las verdades son semiverdades, todas las paradojas pueden reconciliarse
Hemos hablado suficiente de esa dualidad que corresponde al nivel de la forma o el mundo. El Ying y el Yang. En este universo podría ser debidamente enfocado el concepto de los opuestos desde una sabiduría favorable, por ejemplo, para recordar lo que es la alegría podría pasarse por la tristeza, para distinguir lo que es la calma podría ser necesaria la tormenta, para desear fervientemente la Paz o considerarla como verdadero tesoro se podría necesitar saturación de sufrimiento.
Todo fluye y refluye, todo tiene sus periodos de avance y retroceso, todo asciende y desciende, todo se mueve como un péndulo, la medida de su movimiento hacia la derecha es la misma que la de su movimiento hacia la izquierda, el ritmo es la compensación
Sería como combinar el principio de vibración con el de polaridad. Considera un constante movimiento de las cosas que puede verse como un péndulo, de ida y vuelta, considerando la compensación. A mi modo de ver, también podría pensarse en una espiral ascendente aunque se experimenten verdaderos retrocesos o algo parecido pero en un grado vibracional más alto, o bien, en el péndulo sería llegar a la quietud. Por otra parte, puedes observar el principio del ritmo en las emociones o en eventos que presentan un contraste fuerte, de repente alcanzas un logro y otra noticia opuesta puede llegar a tus oidos.
Toda causa tiene su efecto, todo efecto tiene su causa, todo sucede de acuerdo con la ley, la suerte no es más que el nombre que se le da a una ley no conocida, hay muchos planos de causalidad, pero nada escapa de la ley
Básicamente, si se observan efectos se debe a alguna causa. En el concepto del karma se puede identificar que se relacionan aspectos de este principio. Actualmente yo lo veo mas bien como una proyección en donde la causa está en el lente mas no en el telón de proyección. Si se corrige al nivel original terminará reflejándose de modo correspondiente en la proyección.
La generación existe por doquier, todo tiene sus principios masculino y femenino, la generación se manifiesta en todos los planos
Se podría entender como la polaridad aplicada a una esencia masculina y femenina como polos de creación. Su enfoque se remite desde planos superiores hasta su patrón en la biología o lo sexuado. Lo femenino crea y lo masculino lo sostiene.
En “Un Curso De Milagros” se podría relacionar con el concepto de “separación”, comprendiendo que la separación que presenta este universo también se puede encontrar en la polaridad y la vibración, incluso la causa y el efecto se perciben separados en este mundo. Se puede decir que el juego de separación es un truco desde otro nivel y fue una idea loca.
Existen otras perspectivas o información con una orientación más detallada como las leyes universales planteadas por Gerardo Schmedling y la escuela de magia del amor, las cuales requerirían de todo un estudio. No obstante, considerar cualquier ley nos remite al sistema de pensamiento de este universo y se escapa de la visión del “no-dualismo puro”, pero cuando escuchas audios de Gerardo se refleja un sentido muy práctico para el individuo (ya se había mencionado antes lo que él denomina la aceptología).
Gerardo nos participa de una comprensión sobre unas leyes universales que obedecen a los mecanismos del universo, el mundo, incluso la sociedad, así como unas leyes prácticas de la vida diaria que nos brindan pautas verificables en nuestras experiencias del mundo de un modo personal. Por supuesto, lo recomiendo e invito a que explores esta sabiduría.
Por otra parte, quién haya escuchado de algo como la ley de la evolución, o la idea de que se evoluciona en el universo, puede tener acogida y se ubicaría por encima de la ley de la atracción en tanto al orden de resolver su aplicación, siendo la que se enfoca con el propósito de vida así como también tiene en cuenta aquello que no se necesita más conforme a un proceso considerando un universo que busca cierta eficiencia, en mi interpretación, podría traducirse en perdón. Sin negar que se pueda llegar a verificar o tener información de buenas enseñanzas, tampoco siento negar que alguien alcance la iluminación dando saltos cuánticos. ¿Acaso no sería ineficiente pasar eones de eones de años en evolución? Además de desmotivante desde nuestra perspectiva.
Quién, por ejemplo, por medio de seguir los pasos del buda logra en verdad la iluminación, estaría dando ese salto cuántico, y quizás consista en un salto sin distancia. Por mi parte, además de considerar la aceptología de Gerardo Schmedling para las cuestiones prácticas del mundo, siento que la visión y asimilación de oportunidades de perdón conforme a “Un Curso De Milagros” (UCDM) nos lleva a la disipación de este universo. En principio a entrenar nuestra mente haciéndo un análisis simple y directo que consiste en que lo que ves es tan sólo una proyección basada en separación, aprender a detenerte, entonces perdonar las ilusiones en el sentido metafísico, reconociendo la Inocencia de Cristo en ti o en el otro, y confiarlo al Guía Interno o Espíritu Santo. Es un recordar o un reconocimiento de Inocencia, y no una consciencia de culpa, de este modo la culpa Inconsciente la deshace el Espíritu Santo, a esa instancia no tienes que hacer nada.
Como se ha dicho, UCDM nos trae un sistema de pensamiento distinto al del mundo, desde ese marco de referencia que abre las puertas al Espíritu Absoluto, y en esto es bien distinto. Se dice que este sistema de pensamiento también lo puedes identificar en el Evangelio de Tomás. En el mundo encuentras enseñanzas que aportan beneficios a nuestras vidas y hasta se pueden combinar, sin embargo, si se comprende el sistema de pensamiento del Espíritu Santo expuesto en UCDM, vas a encontrar cosas que no se pueden conciliar con otras enseñanzas, salvo algunas cuestiones prácticas.
Por ejemplo, la práctica de enfocarte en el ahora, la meditación, la oración, los decretos, el ejercicio, yoga, la alimentación balanceada, el cuidado de la energía vital, terapias psicológicas o energéticas, son cosas que pueden tener una consideración práctica para nuestras vidas si ásí lo sientes, pero ninguna de éstas logran el objetivo de deshacer las ilusiones del Ego. De hecho, el ahora consiste en la observación de un pasado, aunque se puede acoger en el buen sentido o como un estado favorable en medio de la ilusión pero no la deshace, tampoco la meditación en sí.
Si crees en la evolución del universo y su eficiencia, paradójicamente, ante el planteamiento de UCDM se puede sospechar que este universo sea genuinamente eficiente y que la evolución tenga sentido, y sin embargo se puede abreviar y disipar mediante este camino eficiente que nos presenta su texto.
Por otra parte, lo que en una enseñanza es obra del amor o la sabiduría y quizás se encuentre en la dirección correcta, en UCDM aún dista del verdadero Amor y Sabiduría, puesto que este universo sin sentido no es obra del Padre ni tiene lugar en Su Creación. El universo observable es una fabricación mental o proyección por un aspecto de la Mente, que podemos denominar el Hijo. Además, no deberías buscar hacerte amigo de un Ego que desearía eliminarte, aunque no se habla aquí del aspecto egótico de una persona sino de otra instancia. Las leyes de este universo no tienen lugar en el Universo original del Espíritu y son del gusto del Ego, mas No del Padre o Fuente Original quién desconoce el universo de la proyección y las ilusiones. Su Universo es simple, se dice:
“Dios Es, nada más” (y entonces guardamos silencio)